martes, 28 de junio de 2011

reset

El fútbol es así, todos los sabemos, tiene estas cosas.
Sólo quiero agradecer públicamente las muestras de cariño de los aficionados, especialmente a Manolito el del Bombo, que siempre está ahí en los posts buenos y en los malos.
En las risas y en los lloros.
Tras varias temporadas en la competición (no me atrevo a calificarla de alta), he decidido darme un respiro. Los últimos tiempos han sido duros, pocas ideas fluyendo y en general un agotamiento mental acusado.
Quizás el perido estival me dé la energía necesaria para volver o no.

Mientras tanto, sol, piscina, playa, ir al huerto y porqué no que me lleven también, paella, siesta, vino, tenis, squash....

Gracias.

Lo dicho, A.Sandler, Toscanblues, Barcelona!

viernes, 17 de junio de 2011

Verbenas

Pólvora, coca y cava por un lado.
Pantalones cortos, chanclas y camiseta como “dress code”.
Chiringuitos haciendo el agosto (mucho más que en agosto).
¿Porqué antes de empezar el verano ya hemos escogido “la canción del verano”?
Damm ha invertido bastante últimamente para conseguir dicha nominación.
Terrazas y jardines engalanados con bandas de colores.
Mesas larguísimas, improvisadas con tablones de madera y caballetes.
Hogueras con muebles viejos y los apuntes del curso aunque de un tiempo a esta parte esta tradición se está perdiendo.
Melancolía y pensamientos encontrados pensando en la chica de la clase que no volverás a ver hasta dentro de tres meses. Tres meses? Eso es un mundo…
San Juan abre la puerta del paraíso, verano, sol, playa, mar, jugar, reír, dormir, salir, música, copas, pipas, helado, terrazas, siestas, el Tour, ventilador, el bañador, fiesta mayor, baños nocturnos con alevosía y premeditación…

God save SAN JUAN

miércoles, 8 de junio de 2011

Mis conversaciones en un taxi (II)

Sí, amiguitos, sí. He vuelto a departir con ese gran colectivo, tan español y simpático como es el taxi.
Sants. 19:30. Salgo del Ave. Ha llovido a mares. El asfalto es una prueba circunstancial, los charcos son la prueba incriminatoria. Cola. Hago cola.
Me toca. Subo. Saludo. Me saludan. Indico el destino. Taxímetro en solfa. Disco en rojo. Verde. Parón. Un compañero de fatigas se ha parado obstaculizando el tráfico. Escurrimos el bulto.
Radio en marcha. Noticias. Una mujer muere asesinada a manos de su marido. No sé cuantas puñaladas que me hacen soltar una exclamación. El taxista calla. Sostengo que la gente está “como una luz”. Expresión que carece de sentido en castellano pero con pleno significado en catalán. La gente está chalada, vamos.
El taxista asiente. Empieza a justificar el hecho que alguien (un hombre) mate a una mujer. Me sorprendo pero no me indigno. Su gorra me hace ser cauto. Se explaya. Le dejo. Ah, no que no lo justifica. Tan sólo es que tiene una forma de argumentar, digamos diferente.
Me dice que imagine que estoy casado. Le digo que no me hace falta imaginarlo. Me ahorro comentarios jocosos. Me dice que imagine que me separo de ella. Callo pero no otorgo. Me dice que el juez le dará la custodia de mi mini equipo de fútbol a ella. Me pongo el cinturón. Me habla de pasar una manutención. Abro la ventanilla. Que es posible que mi mujer se cepille a otros. El taxi no tiene más gadgets para subir o bajar, abrochar o desabrochar. Y que imagine entonces si podría llegar a matar.
Sigo sin ver el hilo argumental. Le digo que no me haría gracia, ni puta (gracia). Le digo que me libré de la mili por ser tuerto. No cuela. La broma me podría haber salido cara. Salgo airoso. Argumenta que la mente humana es muy compleja. ¿¿?¿?¿?¿
Me estoy cabreando. Lo nota. Noto que lo nota. Le digo que suba por Aribau. Gira y ejecuta. Enajenación mental transitoria sale a colación. No compro. Aunque estoy de acuerdo que la pinza se nos va a todos. Rectifica. Quiere agradarme con su argumento. La gorra me sigue dando mal rollo. El destino se acerca. El debate empieza a ser de lo más Daliniano, no en la forma ni en su plasticidad. Surrealista a todas luces. 12,65 euros. Cóbreme 13 y me da un recibo.
Conclusión del Gorras: la jodienda no tiene enmienda. Game. Set. Match.