martes, 8 de julio de 2008

el síndrome del casamentero

vuelvo a estar de mudanza, parece que mi "modus vivendi" sea el de estar rodeado de cajas de cartón. Esta vez la mudanza es de trabajo, nos trasladan al Prat (hijos de p...).
Lo primero, miedo y pánico escénico por el tema del transporte (coste económico) pero sobre todo calidad de vida. Me aterra pensar que haré interminables horas de cola.

En fin, ya os diré como es la vida cerca del aeropuerto...

Pero hoy quería hablar del síndrome del casamentero, es una teoría "made in Sandler".
En las últimas bodas a las que me han invitado, he coincidido en el color de corbata con el novio,... y en ambos casos lo hice pensando en intentar no coincidir.
Porque, en mi caso, hay corbatas de diario y corbatas de boda. Al igual que hay camisetas de playa y camisetas de salir o de las grandes ocasiones. También he conocido gente que diferenciaba (no es mi caso) los gayumbos rutinarios de los de "las grandes noches".

En un tiempo donde lo que se lleva es el pragmatismo y se huye de las celebraciones yo siempre he pensado que es bueno dotar los acontecimientos especiales de cierta liturgía y parafernalia porque eso es precisamente lo que les proporciona ese status de "especial". Y me gusta eso de separar ropa de diario de la que uso en grandes ocasiones. Es la evolución del traje de los domingos.

En fin; paridas desde mi último día en frente de la catedral.

4 comentarios:

  1. Pues... bienvenido a tu nuevo emplazamiento, chaval! Ya lo decían los egipcios: somos seres de tránsito!

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  2. primer día y de momento bien. habrá que ver en invierno pero creo que he encontrado la ruta menos dolorosa!!

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  3. rodeado de cajas de cartón?!
    es una buena evolución: del vino con caja de cartón a las cajas para taparte en las noches frías debajo del puente.

    ánimo, siempre puede ser peor!

    j

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  4. jajajaja, J!!

    tu madre te envía saludos y recuerdos.

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